Gran escarabajo de la familia Buprestidae y la subfamilia Chrysochroinae. No lo he visto en la mancha conquense.
Se trata del miembro de su familia más grande de nuestra fauna, incluso de la fauna europea, con un tamaño que puede superar los 3 cm. Tiene una coloración con reflejos metálicos cobrizos o verdosos con tenues áreas blanquecinas. Estas zonas blanquecinas se localizan en áreas longitudinales de cabeza y pronoto fundamentalmente y, de manera menos marcada, en los élitros: unas zonas con forma subcuadrada (en cuatro áreas deprimidas) y otras áreas lineales parciales sobre todo en regiones más laterales. Su superficie dorsal tiene un marcado relieve formado por bandas pseudolongitudinales de trayecto y grosor irregular. Destaca un profundo surco longitudinal en la línea media de la frente. Los ojos son grandes y bien visibles y las antenas delgadas.
Su ciclo biológico está vinculado al pino, principalmente Pinus halepensis. Las larvas son grandes, alcanzando los 7 cm. Se alimentan de madera muerta de pinos enfermos o muertos. Tienen un desarrollo como larva de al menos 2 años. Los imagos permanecen tomando el sol sobre troncos caídos o alimentándose de acículas.
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